Está claro que los frenos de disco llegaron al mundo de las bicis de montaña para quedarse. ¿Te imaginas a una Big Nine de Merida con V-Brakes?
Desde mi punto de vista, los frenos de disco se han hecho indispensables en las modalidades de MTB, ciclocross y gravel. Sin embargo, en las bicicletas de carretera se han encontrado con bastantes más reticencias.
Por eso, en este artículo vamos a analizar tanto las ventajas como los inconvenientes de este sistema de frenado, centrándonos un poco más en las bicicletas de carretera. ¡A ver si aclaramos las ideas!
Ventajas de los frenos de disco
Creo que todos conocemos ya casi todas sus bondades y virtudes, pero vamos a recordarlas:
- Mejoran la capacidad de frenada cuando hay agua o humedad en el ambiente.
- Disminuyen el esfuerzo necesario para frenar, por lo que fatigan menos el tren superior. Muy útil en descensos prolongados.
- Tienen una mejor progresividad, por lo que la frenada puede ser más precisa.
- Liberan a la llanta de la tarea de frenar, limitando el deterioro de la misma y el calentamiento en la cubierta y en la cámara, por lo que evita delaminaciones en llantas de carbono y neumáticos o tubulares estallados o despegados por las altas temperaturas.
- Permiten neumáticos más anchos de hasta 28 o incluso 32 mm.
- Gracias a ello ganaremos en comodidad y reduciremos la fatiga por las vibraciones del terreno.
- Aumentaremos la potencia de frenado.
- La mayor sección de las cubiertas permite también una conducción más segura, ya que la bici da menos latigazos.
Otras características de los frenos de disco
Creo que casi todo el mundo conocía con anterioridad la mayoría de las ventajas que ofrecen los sistemas de disco, pero ahora vamos a ver otros puntos más controvertidos.
Lo primero que quiero aclarar es que no he querido llamar a esta sección «desventajas», porque no son aspectos negativos de por sí; son cuestiones más complejas. Vamos a verlo.
Freno de disco y peso
El peso de una bici con freno de disco suele ser entre 400 y 500 gramos más alto que el de la misma bicicleta con frenos caliper (los frenos de llanta típicos de las bicicletas de carretera).

Por ejemplo, en la Merica SCULTURA TEAM que tenemos en la imagen de arriba, la versión con frenos de disco pesa 6,84 kg, frente a los 6,44 kg de la versión tradicional.
Las pinzas, el propio disco, los tubos, el líquido, etc. pesan más que una configuración equivalente con freno en la llanta.
Los fabricantes quitan importancia al asunto argumentando que la llanta en sí es más ligera, al no necesitar la pista de frenada, pero se olvidan decir que los ejes suelen ser más pesados, porque tienen que ser más rígidos, y que muchas veces las llantas específicas de disco se construyen con más radios o con radios de mayor sección.
Además, también publicitan que el peso está colocado en un punto menos desfavorable, ya que la inercia es mejor, lo que es cierto y minimiza las diferencias dinámicas en comportamiento.
A ver, esto es como todo. Para la mayoría de los cicloturistas esos 400 gramos de más no nos supone ninguna desventaja, a la hora de la competición la cosa puede ser diferente.
Los discos de freno afectan a la aerodinámica de la bici
Al principio, muchos fabricantes afirmaban que los frenos tradicionales eran más eficientes aerodinámicamente los de disco.
Pero con los nuevos diseños (de pinzas y de discos) los ingenieros están consiguiendo una integración mayor y se ha dado la vuelta a la tortilla.
Ya hay fabricantes que empiezan a publicitar que han conseguido mejor rendimiento aerodinámico con frenos de disco que con frenos de llanta, pero no es tan sencillo…
Es cierto que algunas bicicletas aero muy bien diseñadas pueden ser más aerodinámicas con disco cuando el viento viene única y exclusivamente de manera frontal, sin embargo, cuando no es así y el viento nos da de manera lateral, la resistencia al aire es mayor.
Pasa exactamente lo mismo que con las ruedas lenticulares que a veces se usan en contrarreloj. Son mejores o peores dependiendo de las circunstancias.
La alineación
Sí, los frenos de disco de carretera también rozan. Y desde mi punto de vista, hay pocas cosas que me saquen de mis casillas más que eso.
El problema suele tener dos causas que pueden trabajar juntas, o no, en favor de nuestra desesperación.
La primera y más importante, es que el montaje de la pinza del freno tiene que ser perfecto. Para ello, las caras de ajuste de la horquilla y del tirante (las que reciben a la pinza) tienen que estar perfectamente refrentadas. Esto hace que los puntos de montaje estén lisos, nivelados y con una alineación perfecta.

Por desgracia, este es un proceso delicado y que requiere algo de atención y tiempo. Algo que algunos fabricantes de cuadros no están dispuestos a gastar en las bicicletas de gama media y baja.
Si tienes curiosidad, el proceso es el siguiente.
Como puedes ver, se requiere de una maquinaria especializada, conocimiento y tiempo.
El siguiente culpable del roce del disco es el desalineamiento de la pinza de freno. Normalmente la solución es bastante más fácil y basta con aflojar los tornillos, apretar la palanca del freno y apretar los tornillos; de manera que la pinza se centre sobre el disco.

Eso es así siempre que los agujeros de los tornillos tengan las medidas o métricas adecuadas, 4 x 5,2 mm (+/- 0,1 mm), para los montajes Flat Mount. Cosa que no siempre cumplen los fabricantes, por lo que tenemos menos juego del necesario para ajustar correctamente la pinza.
Como ves, el roce de los discos puede ser un problema con una solución muy fácil u otra bastante más complicada; y es que el sistema Flat Mount requiere que el proveedor del cuadro tenga más cuidado en la fabricación; cosa que suelen descuidar con mayor frecuencia en las bicicletas más baratas.
Mantenimiento
Los frenos de disco son una gozada cuando van bien, pero pueden ser una pesadilla cuando no. Por eso es importante que sepamos realizarles el mantenimiento adecuado, que por otra parte es más laborioso y complejo que el mantenimiento de los frenos caliper normales.
El mantenimiento de los frenos de disco incluye:
- Ajustar los frenos.
- Cambiar las pastillas.
- Cambiar el cableado.
- Purgar los frenos.
- Cambiar el aceite.
Como ves, no son tareas demasiado complicadas, pero sí que pueden resultar incómodas si lo queremos hacer en casa. Sobre todo, porque corremos el peligro de ponerlo todo perdido con aceite.
Además, tendrás que comprar algunas herramientas nuevas para hacer el purgado.
Si no quieres complicarte la vida, puedes traer la bici a nuestro taller.
Pastillas de freno
Las pastillas de freno se gastan con relativa velocidad, por lo que tendrás que aprender a elegir el tipo de pastillas más adecuadas para ti.
Todas las pastillas se fabrican mezclando varios aditivos en polvo con un agente aglutinante. A continuación, se meten en un molde a la vez que se aplica alta temperatura y presión para formar un bloque sólido: la pastilla.
A la hora de elegir la mejor pastilla es importante que conozcas las diferentes mezclas de componentes, porque de ellos dependerán las características de frenado.
La mayoría de las bicicletas nuevas vienen equipadas con pastillas de resina. Están hechas con aditivos no metálicos como caucho, vidrio, carbono y Kevlar que proporcionan una frenada muy buena, pero que se desgastan muy rápido en condiciones húmedas o si las calentamos en bajadas prolongadas.

Cuando se gastan, la mayoría de la gente suele cambiarlas por pastillas sinterizadas, que son algo más caras, pero muchísimo más duraderas. Utilizan polvos con proporciones altas de metales como cobre, acero y hierro. Proporcionan un frenado fuerte y efectivo a altas temperaturas, aunque su mordida es más pobre, sobre todo cuando están frías.
También hay que tener en cuenta que las pastillas sinterizadas desgastan más los discos de freno que las de resina.
Por cierto, ten en cuenta que los frenos de disco nuevos necesitan un periodo de rodaje en el que no frenarán al máximo nivel. Este proceso es necesario para que el material se vaya desgastando y distribuyendo sobre las superficies, aumentando la fricción y maximizando el área de contacto entre los discos y las pastillas.
Según SRAM el mejor rodaje para las pastillas consiste en acelerar la bicicleta hasta una velocidad moderada de unos 20 km/h y aplicar los frenos hasta reducir la velocidad a unos 3 o 4 km/h. Repite este proceso unas 20 veces. Luego acelera hasta unos 30 km/h y vuelve a frenar a unos 3 o 4 km/h unas 10 veces. Es importante que durante este proceso no detengas del todo la bici, ni bloquees las ruedas en ningún momento.
Las pastillas pueden chirriar
Tanto los frenos de llanta, como los frenos de disco chirrían a veces, pero son estos últimos los culpables más reincidentes.
La causa más habitual es la contaminación del disco o de las pastillas. Pasa de forma natural al caerles suciedad de la carretera, pero también tenemos que tener mucho cuidado al usar lubricantes en espray para que nada manche los discos. De hecho, es muy recomendado no usar lubricantes en espray en bicicletas con este sistema de frenado.
Para limpiar los discos hay productos especiales, pero las pastillas son más complicadas de limpiar. Podemos lijarlas con un papel de lija grueso para quitar las manchas superficiales. Pero si el aceite o la grasa ha penetrado, la mejor solución es cambiarlas.
Los discos también se desgastan
Una de las ventajas de los frenos de disco es que no desgastan las llantas, por lo que se acabó el sufrir al bajar un puerto pensando en el dinero que te está costando cada frenada…
Aun así, los discos también se desgastan relativamente rápido, aunque por suerte suelen ser bastante económicos.

Normalmente los discos tienen unas muescas para saber el límite de desgaste y cambiarlos antes de que sea peligroso usarlos.
Rendimiento y competición
Está claro que los frenos de disco son mucho más potentes y tienen mejor tacto que los frenos de llanta. Sin embargo, a la hora de la verdad, descendiendo puertos, no vas a conseguir ventaja ni vas a bajar más rápido por tener frenos de disco, sobre todo si tienes buena técnica.
También es cierto que las sensaciones suelen ser mejores con los frenos de disco. Hay que hacer menos fuerza, por lo que necesitamos menos dedos y nos permite sujetarnos de manera más cómoda al manillar.
Se han hecho bastantes pruebas descendiendo puertos de montaña en diferentes condiciones meteorológicas y la gente con buena técnica baja igual de rápido con un tipo de frenos que con otros. Eso sí, la cosa cambia si no somos muy buenos bajadores, la seguridad que dan los discos nos da más confianza y podemos apurar un poco más la frenada sin correr riesgos.
Por otro lado, en competición, los frenos de disco tienen un inconveniente muy importante. No, no hablo de la peligrosidad en caso de caída.
Por cierto, a mí, que tengo experiencia con herramientas de corte, me dan más miedo los dientes de los platos que los discos de freno.
Me refiero a la velocidad del cambio de rueda.
A mí me da igual tardar 10 segundos que 1 minuto en cambiar en sacar y meter una rueda, pero a un profesional no. Por eso, cada vez más, los equipos profesionales que usan frenos de disco en vez de cambiar la rueda pinchada cambian la bicicleta completa. Lo que puede llegar a ser un problema logístico importante.
No me aclaro, ¿me compro una bici de carretera con freno de disco o no?
Las bicis de carretera con frenos de disco, también, han llegado para quedarse. Eso sí, no tengas prisa. ¿A qué me refiero?
Por ejemplo, las primeras bicicletas de carretera con discos venían equipadas con pinzas que utilizaban el montaje de 74 mm heredado de las bicicletas de montaña, donde la pinza de freno se atornillaba a los adaptadores para acomodar diferentes tamaños de discos. Vamos, que no se comieron mucho la cabeza e hicieron un pequeño Frankenstein.
Al cabo de un par de años Shimano introdujo un nuevo diseño que cambiaba el sistema de montaje: el Flat Mount (montaje plano). Este sistema, que ha sido adoptado por el resto de los fabricantes, es más pequeño y compacto, mejorando la integración con el bastidor y la horquilla y reduciendo el peso. Además, quedan muuuuucho mejor…

Con esto quiero hacer notar que los frenos de disco acaban de llegar a las bicicletas de carretera y les queda mucho margen de mejora y muchos cambios que pueden quedarse obsoletos en cuestión de unos pocos años. Así que no cambies de bici solo para tener frenos de disco, saldrán sistemas mejores todos los años.
Por ejemplo, ahora están llegando al mercado los cierres rápidos con diferentes tamaños de bujes. ¿Quién sabe lo que mejorarán de aquí a 2 o 3 años?

En resumen
Desde mi punto de vista:
- En montaña disco sí o sí.
- Ciclocross disco sí o sí.
- Gravel disco sí o sí.
- En carretera: sí para aficionados, no para profesionales.
Con esto me refiero a que los frenos de disco son beneficiosos para los aficionados, pero no para los profesionales; no que no los vayan a usar.
No nos fijemos en lo que hacen o dejan de hacer los profesionales. Ellos
pueden usar todos los carriles para bajar un puerto y apenas frenan. Aun así, las marcas les están presionando mucho para que usen bicicletas de disco, por lo que tiene toda la pinta de que también se van a imponer en esa gama.
Desde mi punto de vista, no todo es marketing. Unas marcas quieren ganar a otras. Son como las 29”… al principio que si marketing que si tal que si cual…ahora todo el mundo prefiere las 29”.
Los frenos de disco son superiores en rendimiento y aportan más ventajas que desventajas. Es más, en mi opinión las únicas desventajas reales de los frenos de disco frente a los frenos de llanta son el peso y la velocidad del cambio de rueda, el resto de los argumentos juegan a favor de los discos.
Si a esto le sumas que un cicloturista puede llevar mochila, alforjas, etc. la potencia de frenado de los discos aporta seguridad real.
Yo tengo bastante claro que todas las bicis de carretera para aficionados acabarán llevándolo. Únete.
No tengas prisa por cambiar tu bici, pero, cuando la renueves, apuesta por el disco de freno, no te arrepentirás.
🙂
Hola! Les hago una pregunta: Me están ofreciendo una bici rodado 29 que tiene un freno a disco adelante un v brake atrás. Es peligroso que las ruedas frenen diferentes? Gracias!
Hola Fernando. No es la mejor vía para realizarnos una consulta. Mucho mejor a través de nuestro mail info@biciclaje.es o bien por teléfono en cualquiera de nuestras líneas 912596073, 656579987 si no te puedes pasar por nuestra tienda física en Alcorcón (Madrid).
La bicicleta que te ofrecen debe ser algo antigua ya y de gama antigua para que sea así; no obstante no es peligroso, sencillamente que notarás diferente tacto en los frenos así como potencia de frenado.
Saludos!
Por que el caliper se revienta cuando freno
Hola a todos me he comprado bici con frenos de disco Ultegra
Si dejo la bici colgada de la rueda delantera en posición vertical
puede afectar al sistema de freno ?
gracias por vuestros comentarios